Títeres

A: Mirtala.

Este es el títere de prueba, el primero, el que ha empezado con todo... de prueba de que podía hacerlo si me lo proponía. No tiene ni nombre ni otra característica que lo identifique... sin embargo, le tengo mucho cariño ya. Espero retomarlo ahora con más calma y darle rasgos de personalidad que lo saquen del mero artificio de ser la prueba palpable de momentos de lucidez.
El segundo es más grande, más colorido, con ojos amarillos y manos regordetas. Es un sapo que mueve boca y manos. La idea era hacer cada uno de los personajes de una parte del Pop Wuj, de la parte donde los animales le llevan un mensaje a Hunajpu e Ixb'alamqe (un piojo, un sapo, una serpiente y un águila). Y este es el sapo.El tercero que pongo acá en realidad es el cuarto que fabriqué. Faltan fotos de un águila gris... no tengo idea de a dónde pudieron ir a parar esas fotos... pero buenoooo... dejo acá la foto de la cabeza y parte del cuerpo de la serpiente.
Ya dentro de poco espero reiniciar la tarea de fabricar más títeres. Y, claro, colocaré las fotos cuando llegue ese momento.

Diciembre...

Diciembre no fue tiempo perdido. Alcanzó para descansar de la rutina del trabajo (que es poca, pero llega a aturdir), alcanzó también para estar en casa, para viajar y recordar caminos que van quedando un poco truncos.
La imágen que aparece sobre estas líneas corresponde al lago de Atitlán visto desde San Pedro la Laguna, municipio del departamento de Sololá. El viaje fue realizado en ese diciembre tan cercano y lejano ya. Me acompañó Giovanni y fueron un par de días de vagar y reflexionar sobre todo esto que nos espera y que no esperamos.
Mil sueños son el todo, mil sueños es la nada.