En la entrada de la iglesia de Santa María del Pi en Barcelona...A ellos dos les debo una nostalgia nueva y agradecida, a ellos dos les debo estar entero y caminando otra y otra vez luego de ese viaje. Con cariño y paciencia me hicieron parte de su familia Catalana y Guatemalteca. Con alegría me recibieron en su casa y compartimos pan, café, vino y zumo de frutas de la cope. Con sus sonrisas anchas convirtieron en un sueño fatuo mi ya famosa tendencia de sentirme desarraigado. Porque con ellos no hay desarraigo, porque con ellos no hay nostalgia vana, porque con ellos hay amigos más que siento y quiero hoy, ahora, acá.
Germán y Pati: Pati y Germán. Mi hermano y mi cuñada: mi hermana y mi cuñado.
1 comentario:
Edgarín!!!
pero qué poetas son tus palabras, qué escribientes tus letras, qué sentimentales tus sentimientos, qué bonita haces la vida cuando la escribes y la pones en la web!
pero si en realidad fue (lo digo para l@s navegantes) un rompe-piernas, tu estancia aquí! en serio, se rompió dos veces las rodillas, tuvo mal de amores, no encontraba monedas (y no era un problema de falta de liquidez), no llegó al primer curso de clown, pasó un frío que te cagas, sufrió un cambio abrupto de habitación, se quedó sin yogures, estuvo un mes sin frijolitos, tuvo que pagar taxi... en fin, por no hablar de lo bueno.
No, si este tío es de cuidado. Llegó solito a casa, 20 y pico kilómetros más allá de la estación de Sants a las tantas de la noche. Cargado de monedas, pero ¡cuidado! con intención de cambiarlas, y no divisas, sino monedas viejas, del año de la picor. Se pasó una conferencia cantando. Con su rodilla chunga se fue en bici desde el Vallés, casi desde el Baix Llobregat, hasta la desembocadura del Besòs, con otro loco como él a quien casi ni conocía. Llegaba reventado a casa por la noche, y se ponía a escribir en su libretita para no olvidarse de nada...
En fin, un pájaro, vayan con cuidado con él. Eso sí, no para de hacer blogs y webs y poner en la red de Bill Gates poesías, canciones, relatos... en fin, todo un cronista de su tiempo y su barbuda circunstancia.
Por aquí no le vamos a hacer una plaza pero hay muchas (plazas) que saben de él, y le esperan para que no vuelva demasiado tarde.
Un abracísimo y besísimos desde esta Sant Cugat pija que te adoptó quizás por pijo, jeje.
GyP
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